Es una de las dos Residencias de Hermanas Mayores que la Congregación de HCSA tiene en Garrapinillos (Zaragoza) y comparte con la otra:

- La celebración diaria de la Eucaristía, el sacerdote que viene cada mes para confesar y para la Unción de Enfermos (1 vez al año y cuando se precisa), los Ejercicios Espirituales en la Casa.

- La cocina, el lavadero, el salón de conferencias, el gimnasio, un ascensor, el jardín y el velatorio-columbario (que también acoge Hermanas de otras comunidades).

- La Hermana administradora y las que hacen de chófer.

- El trabajador de mantenimiento y el personal de la Fundación “Servicios Auxiliares Betania, Sociedad Cooperativa" (17, entre cocineras, gerocultoras y limpiadoras)

- El fisioterapeuta, que acude un día en semana 3 horas: 1 para enseñar informática, otra para ejercicios de psicomotricidad con las Hermanas de la enfermería y otra para gimnasia con las demás Hermanas de las dos comunidades.

- La atención del médico del centro de salud, que se desplaza a visitarlas cuando lo requieren, y hacerles los controles necesarios.

- La implicación en pastoral de la salud, visitando una vez al mes la Residencia Los Pinos, donde animan celebraciones de la Palabra y distribuyen la comunión.

La Residencia de la Comunidad Siloé tiene capacidad para acoger a 45 hermanas en habitaciones con cama articulada y baño geriátrico: 22 en la enfermería y 23 más entre la 2ª y 3ª planta.

Cuenta con portería, capilla, con coro (al que se accede desde la enfermería), recibidor-comedor de huéspedes, 2 comedores de Hermanas (en la enfermería y la planta baja), salas de estar-TV, despacho de enfermería, office, planchador, sala de informática, pasillos con pasamanos, rampas con antideslizante, ascensores camillero y montaplatos.

8 Hermanas (5 enfermeras y 3 voluntarias), junto con las gerocultoras y la superiora que se ocupa de la parte espiritual, atienden la enfermería, y otras Hermanas se ocupan de la portería, el comedor y la capilla.