Julia Moral Montañés
Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que crea en mí, aunque esté muerto, vivirá. (Juan 11,25)
Nació en Terrer (Zaragoza – España) el día 12 de abril de 1948.
Comenzó el Postulantado el día 31 de mayo de 1968. El día 15 de diciembre de 1968 inició el Noviciado y pronunció los Primeros Votos el día 15 de marzo de 1971. Hizo su Profesión Perpetua el día 30 de agosto de 1978.
Formó parte de las siguientes Comunidades:
- Colegio “Santa Ana”, Zaragoza (España).
- Escuela “Nuestra Señora de la Paz”, Zaragoza (España).
- Colegio “Santa Ana”, Daroca (Zaragoza – España). Superiora.
- Misión Rural, Used (Zaragoza – España). Superiora.
- Escuelas “Esteban Cordero”, Guayaquil (Ecuador). Superiora.
- Casa Misión “Santa Ana”, Lago Agrio (Ecuador). Superiora.
- Casa de Acogida “Juan Bonal”, Zaragoza (España). Superiora.
Hna. Julia fue una mujer tan entregada y disponible, como generosa y agradecida, actitudes que llevaron su ser de Hermana de la Caridad de Santa Ana por distintos lugares y servicios.
Estuvo 22 años en la Provincia de San José, en Ecuador, donde aprendió las bondades del sacrificio, la austeridad, la fe, la solidaridad, el compromiso con la justicia y la confianza.
En el año 2014 se incorporó a la Provincia de Nuestra Señora del Pilar y comenzó a acompañar dignidades, a compartir vidas rotas y cuerpos violentados, transmitiendo esperanza, afabilidad y ternura. Hna. Julia siempre vio vida y posibilidad donde otros sólo veían abuso y explotación. Querida por el que se acercaba a ella, pendiente de los más frágiles, defensora de los pobres, hizo de la Caridad hecha Hospitalidad tarea constante y modo de vida.
Mujer de fe, orante y amante de la vida comunitaria, discreta y con ese punto de timidez que despista a los que creen que lo saben todo. Mucho la añoran y echan en falta su familia, hermanas y sobrinos que tanto la querían y en quien tanto se apoyaban; sus queridas mujeres prostituidas, que podían estar horas aferradas a su mano esperando que el dolor se transformara en celebración y gratitud, y su Comunidad que tiene que llenar un enorme hueco con una más aún certeza de Vida para siempre.
Hna. Julia se fue de repente, sin esperarlo. Nos deja un encargo, el de contemplar cada vida en toda su dignidad de Criatura, sin mucho más por nuestra parte que agradecer a Dios tantas oportunidades de celebrar la vida. Sus últimas palabras, bendiciendo la mesa… “danos la unidad”.
Fue llamada a la Casa del Padre el día 21 de noviembre de 2019 en la Comunidad de la Casa de Acogida “Juan Bonal”, en Zaragoza (España), a los 71 años de edad y 50 de Vida Religiosa,
¡DESCANSE EN PAZ!