Manuela Eguía Solaeche

Le has concedido el deseo de su corazón…
Le concedes bendiciones incesantes,
la colmas de gozo en tu presencia.
(Sal 20,3.7)
Nació en Las Arenas (Vizcaya - España) el día 5 de agosto de 1921.
Comenzó el Postulantado el día 25 de agosto de 1937. El día 15 de diciembre de 1937 inició el Noviciado y pronunció los Primeros Votos el día 15 de diciembre de 1939. Hizo su Profesión Perpetua el día 15 de diciembre de 1944.
Formó parte de las siguientes Comunidades:
- Colegio “Santa Ana”, Zaragoza (España).
- Colegio “La Inmaculada”, Ampuero (Cantabria – España).
- Casa Noviciado, Zaragoza (España), donde ejerció el servicio de Auxiliar de la Formadora de Novicias.
- Colegio “Nuestra Señora del Pilar”, Caracas (Venezuela).
- Colegio “Santa Ana”, Trujillo (Venezuela).
- Pensionado del Pilar, Caracas (Venezuela).
- Colegio “Zaragoza”, Maracaibo (Zulia – Venezuela). En dos ocasiones.
- Colegio “Madre Ràfols”, Valera (Trujillo – Venezuela).
- Casa Provincial de la Provincia del Sagrado Corazón de Jesús, Madrid (España). Secretaria Provincial.
- Colegio “Villa Cruz”, Zaragoza (España). Vicaria Provincial de la Provincia de Nuestra Señora del Pilar y Superiora.
- Misión Católica, Dimbokró (Costa de Marfil). Superiora Delegada de la Delegación de San Juan Bautista.
- Guardería Infantil Española, Londres (Reino Unido).
- Hermanas Profesas de la Casa General, Zaragoza (España). Responsable de los Procesos de Canonización de nuestros Fundadores y del Archivo de nuestra Congregación.
Hna. Manuela quedó huérfana de padre y de madre, y su familia la llevó interna en nuestro colegio de Portugalete. Su trato con las Hermanas despertó su deseo de entrega al Señor y a sus 16 años entró en la Congregación.
Siempre había deseado ir a las misiones y, en el año 1957, fue enviada a Venezuela, viviendo la Caridad hecha Hospitalidad en distintas Comunidades durante diez años.
El 6 de junio de 1975, Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, Hna. Manuela asumió con total disponibilidad el servicio de Superiora Delegada de la nueva Delegación de San Juan Bautista, servicio que desempeñó durante cuatro años, hasta su supresión.
Tras este servicio Hna. Manuela fue destinada a la Casa General, para que se hiciera cargo del Archivo de la Congregación y de los Procesos de Canonización de Madre María Ràfols y Padre Juan Bonal, servicio en el que durante cuarenta años puso todo su entusiasmo, inteligencia, disponibilidad y amor para que la santidad de nuestros Fundadores fuera reconocida en la Iglesia Universal.
Fue muy valioso el trabajo que Hna. Manuela realizó al frente de estos Procesos. Este servicio le llevó a tener que entrevistarse en varias ocasiones con diversas personalidades de la jerarquía eclesiástica y civil, y con otras personas relacionadas con estos fines. La Hna. Manuela no se arredraba y trataba con todos con naturalidad, sencillez y eficiencia.
En su entrega cotidiana destacaba su gran dedicación en la redacción de los Boletines dando a conocer las Causas de Canonización de nuestros Fundadores. En 1992 escribió un pequeño libro sobre la vida del Padre Juan Bonal que tituló “Juan Bonal, Héroe de la Caridad”.
Es de resaltar su amor entrañable a la Congregación y su total entrega en los diversos servicios que se le confiaron, tanto en España como en Venezuela y en las Comunidades de Costa de Marfil y Londres.
En el año 2010 su salud se fue deteriorando. La Hna. Manuela acogió sus limitaciones y cambió de ritmo de vida, viviendo la misión de la Congregación en la enfermería de la Comunidad.
Siempre manifestó su amor incondicional a Dios y a la Congregación. A las Hermanas nos daba ejemplo participando en todos los actos de Comunidad, aunque tuviera mucho trabajo. Era muy atenta con las Hermanas que le pedían algún favor. Como conducía el coche de la Comunidad, siempre estaba dispuesta a llevar a las Hermanas donde lo necesitaran. Era muy fervorosa y manifestaba su amor entrañable a la Santísima Virgen.
Durante sus últimos tres años, aunque su salud se iba deteriorando poco a poco, se mostraba con gran paz y nos demostraba su cariño dándonos los besos que le pedíamos.
Hna. Manuela fue un regalo de Dios para la Congregación y en las distintas tareas que le fueron encomendadas en España, Venezuela, Costa de Marfil y Reino Unido, donde acogió, acompañó, educó, lideró, promovió las Causas de Canonización de nuestros Fundadores, custodió el Archivo de la Congregación y sirvió “con el mayor cuidado, con todo detalle, con todo amor”.
Damos gracias a Dios por la larga vida de Hna. Manuela; una vida entregada al Señor Jesús y, en Él, al servicio de sus Hermanas y hermanos, especialmente de los más pobres y necesitados a ejemplo de nuestros Fundadores; una vida tejida de gestos de Caridad hecha Hospitalidad.
Fue llamada a la Casa del Padre el día 28 de septiembre de 2013 en la Comunidad de Hermanas Profesas de la Casa General, en Zaragoza (España), a los 92 años de edad y 76 de Vida Religiosa.
¡DESCANSE EN PAZ!